martes, 7 de abril de 2009

Viva la libertad, ¡¡viva!!


Se puede considerar libre una persona que trabaja de lunes a domingo, sin un solo día para descansar. Se puede decir libre una persona que subsiste económicamente con lo mínimo.
Tiene sentido la libertad de prensa si solo algunos privilegiados pueden acceder a los contenidos de esta.
No es la libertad, hoy en día un derecho pleno solo para algunos.
Hoy por hoy ¿no tiene una estrecha relación, el ejercicio de ser libre con el poder adquisitivo?

De que me sirve el cine sin censura si no tengo el dinero suficiente para disfrutar de una película. De que me sirve que la libertad de publicar libros, si no los puedo comprar.
Son contradicciones de este sistemas que nos da tantas libertades, pero que solo son accesibles para algunos.

Esta crisis voraz, creada por aquellos que lo hagan bien o mal, que se aseguraron una millonaria indemnización, no es solo una crisis económica que afecta al empleo y a la macro economía.
Es una crisis moral, existencial y de vida. Llego el momento, y algunos ya lo están haciendo, no solo de revisar una vez al año los sueldos mínimos, sino que por ética, si por ética, esa que muy pocos han tenido durante estos años, revisen también los sueldos máximos.

Llego el momento de una vez por todas, que se deje de decir que el capitalismo es el mejor sistema y el que a subsistido exitosamente durante mas tiempo.
Lamentablemente lo fue durante muchos años para algunos, los mismos que después de años de ganancias millonarias estiraron tanto el elástico, que lo terminaron rompiendo, importándole, claro esta, un rábano las verdaderas consecuencias de sus actos.

Y después del primer acto del siglo XXI, esta claro que ellos podrán dejar de ganar por un tiempo, pero nunca perderán.

Quiero decir que no me quejo solo por quejarme. No me quejo con la intención de que me regalen algo. Desde pequeño he tenido como ejemplo familiar que las cosas se consiguen con trabajo y esfuerzo. Pero llega un momento, como el actual, que para distintas generaciones esta lucha es estéril y cada día mas desesperanzadora.

Esta claro que no hay nada mejor que la libertad, y que hoy en día no hay una mano negra que nos la este coartando. Pero si queda en evidencia claramente, que unos pueden sacar mas provecho que otros de las libertades que nos da el siglo XXI.