domingo, 21 de marzo de 2010

Nuestra nueva vida

Pastillas para adelgazar, pastillas anticonceptivas, pastillas para el dolor de cabeza, pastillas para concentrarse y pastillas para la felicidad.

No tengo duda que los cambios en la forma de vida que han experimentado los seres humanos en los últimos 100 años nos han llevado de una u otra manera a una contradicción que por ahora solo los medicamentos estan ayudando a solucionar.

Las innovaciones tecnologías, la forma de urbanizar las ciudades modernas, los increíbles aparatos que hemos introducidos en nuestros hogares, o que llevamos junto a nosotros, nos han cambiado la vida para mejor en muchos sentidos. También nos comienzan a cambiar hábitos a los cuales hemos estado acostumbrados por miles de años.

A consecuencia de todo esto, la química de nuestro cuerpo también comienza a cambiar. Esa química que antes nos la suministraba la relación con la tierra, con nuestro entorno, con otros seres humanos, con la familia y con el amor, hoy poco a poco comienza a ser remplazada por pequeñas pastillas que te suplen todas estas necesidades afectivas y quimicas y te llevan, quizás no ha la felicidad, pero si a un estado de neutralidad, en donde nos hacemos esteriles a lo que el ambiente nos puede provocar, bueno y malo.

Cada día estoy mas convencido que esto que se dice, que nuestro cerebro no esta preparado para la vida moderna, es cierto.

Todos buscamos el reconocimiento y el amor. Vivimos en una búsqueda constante de la felicidad, de la realización personal, de hacer que de alguna manera esta maquina química que somos se ponga en marcha y nos suministre algo de bienestar y placer.

Veo como la vida moderna nos hace todo mas fácil, pero en otro sentido nos provoca profundas carencias que van destruyendo a las personas por dentro.

En mi afán siempre de adivinar el futuro, me pregunto si será que de aquí a unos años tomaremos pastillas para el amor, pastillas para sentirnos acompañados, pastillas para sentirnos reconocidos, aceptados, amados.

Será que todo esto que no es capaz de suministrarnos la vida moderna, tendremos que tomarlo en forma de píldora cada mañana al salir de nuestras casa.